La cacería ilegal y la irresponsabilidad en la tenencia de perros domésticos son los factores de mayor incidencia en la disminución de guanacos en las zonas Norte y Centro del país, por lo que urge que la ciudadanía que involucre activamente en la prevención de estos hechos y denuncie tales actividades. Esa fue la principal conclusión a la que llegó el grupo de estudiosos en el Taller Científico de Expertos del Guanaco, efectuado los pasados 3 y 4 de noviembre en la capital regional.
También se destacó la necesidad de aumentar la fiscalización ante denuncias por parte de organismos como la Corporación Nacional Forestal (CONAF), el Servicio Agrícola y Ganadero (SAG), Carabineros, Policía de Investigaciones y municipios.
Al respecto, Diego Morales Banda, director regional de CONAF, entidad organizadora de la actividad, indicó que constatan permanentemente la presencia de perros asilvestrados en Áreas Silvestres Protegidas de la región, como los parques nacionales Llanos de Challe y Pan de Azúcar.
“Hemos establecido permanentes jornadas de educación ambiental y charlas con la comunidad por parte de los guardaparques, como también erradicaciones de perros, pero nada de ello sirve si en un lapso breve la gente sigue abandonando perros en zonas periurbanas, rurales o aledañas a áreas silvestres protegidas, que a la larga llegan a los parques nacionales”, indicó.
Cabe señalar que los guanacos tienen sistemas de defensa ante sus depredadores naturales, como el puma, sin embargo, los canes los persiguen hasta agotarlos, lo cual ha mermado sistemáticamente su población en parques nacionales, lugares en donde existen censos que dan cuenta de un problema experimentado en todo el territorio regional.
Por ello, llamó a la comunidad a cuidar y esterilizar a las mascotas convenientemente, para evitar la proliferación de canes que a la larga, constituyen no sólo un peligro para la fauna silvestre, sino también para el ser humano.
Sumado a lo anterior, expresó que la caza furtiva continúa manifestándose en la región, siendo que la especie está protegida por la Ley de Caza administrada por SAG. “Es una irresponsabilidad mayúscula cazarlos y, por sobre todo, amparar y fomentar esta práctica con la adquisición de su carne en este mercado negro. ¿Qué sentido tiene extinguir una especie como el guanaco si después no quedarán ejemplares ni siquiera para apreciarlos?”, cuestionó Morales.
Aunque el camélido también es afectado por otras actividades humanas como la construcción de infraestructura en su hábitat o causas naturales como la sarna, llamó a la comunidad a denunciar la caza y el abandono de perros ante los organismos pertinentes, como el SAG o los municipios, respectivamente.
“El guanaco, es sin duda una de las especies mas representativas de la fauna nativa chilena, dada su distribución y capacidad de adaptación, comparable al canguro en Australia, lamentablemente no se le ha relevado de buena forma en nuestro país, por lo que se requiere iniciar campañas nacionales y regionales tendientes a posicionar y relevar la especie en la sociedad chilena y precisamente eso buscamos a través de la elaboración del Plan Nacional de Conservación de este camélido sudamericano”, concluyó Morales.
Caza ilegal y ataque de perros asilvestrados son las principales amenazas que enfrenta el guanaco
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