Tras intervenir en la IV Conferencia Internacional de Innovación en Minería, Minin 2010, que culmina este viernes en Santiago, el geólogo explicó a EFE que los proyectos mineros en zonas de alta montaña pueden afectar a las masas de hielo y al mismo tiempo éstas ponen en peligro a la propia infraestructura minera. Marangunic, director de la empresa Geoestudios, apuntó que la actividad minera en esas regiones «acelera la extinción» de los glaciares, pero reconoció que cada vez hay mayor disposición por parte de las autoridades medioambientales a evitar que estas masas de hielo, consideradas valiosas reservas de agua, se vean afectadas. En este sentido se refirió al proyecto que desarrolla la empresa minera canadiense Barrick Gold en la cordillera de Los Andes, sobre el límite internacional chileno-argentino, en la provincia de Huasco, en la Región de Atacama. El proyecto Pascua-Lama, en el que la canadiense proyecta una inversión estimada de unos 3.000 millones de dólares, estuvo sujeto a numerosos estudios de impacto ambiental después del enorme rechazo que suscitó. «Las autoridades prohibieron que Pascua-Lama tocara los glaciares y hasta donde yo sé no se están afectando», apuntó Marangunic, tras explicar que se está haciendo una auditoría del avance del proyecto minero para revisar que así sea.
Glaciares en Chile
Casi el 80 por ciento de los glaciares de Latinoamérica se encuentra en Chile y de ellos el 90 por ciento está en proceso de regresión por distintos factores, entre los que destaca el aumento de la temperatura de la tierra. «Lo más prudente es intentar evitar cercanía de proyectos mineros a glaciares y cuando no se puede, deben buscarse mecanismos para evitar peligros y riesgos», indicó. El geólogo explicó que el problema no es tanto que las empresas mineras no respeten estas masas de hielo, ya que «no les interesa que sus proyectos corran algún tipo de riesgo o que no sean autorizados por autoridades medioambientales», sino que en la minería «conocen muy poco a los glaciares».