Ministro de Energía es cuestionado por su apoyo a Termoeléctrica Castilla e Hidroaysén

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Parlamentarios calificaron como “grave” y como “una presión indebida” las recientes declaraciones del ministro de Energía, Ricardo Rainieri, quien señaló a La Tercera que la suspensión de la central Barrancones fue un hecho excepcional y que la única manera de dar un salto al desarrollo de aquí al 2018 es a través de proyectos como las represas de Hidroaysén y la central termoeléctrica Castilla. Su principal argumento fue que la generación hidroeléctrica y térmica rebajarían los precios de la tarifa eléctrica.

Alfonso de Urresti, diputado (PS) miembro de la Comisión de Recursos Naturales de la Cámara baja consideró “de extrema gravedad” que el Ministro “dé públicamente la bendición a dos proyectos que están en estudio y cuya viabilidad ambiental es extremadamente cuestionable”, informa el sitio web de la Cámara.

De Urresti, junto a su compañero de partido, Marcelo Díaz (PS), insistieron en que la situación es “una grave presión” hacia los organismos públicos que deben pronunciarse sobre los estudios de impacto ambiental de estos proyectos y que “se estarían repitiendo los mismos vicios” que en el proceso de aprobación del proyecto Termoeléctrico Barrancones, “ya que la Corema de la Cuarta Región aprobó esa iniciativa en consideración a las evidentes señales positivas que envió el gobierno central”, afirmó Díaz, diputado por la Región de Coquimbo.

Alberto Robles, diputado del Partido Radical, va más allá y señala que el ministro Rainieri presionó a la Corte Suprema para favorecer a la Termoeléctrica, esto en el marco de la apelación que presentó la empresa CGX (ex MPX Energía) para revertir el fallo de la Corte de Apelaciones de Copiapó que mantuvo la calificación de “industria contaminante” al proyecto energético.

Por otro lado, el propio presidente Piñera ha profundizado en las palabras de Rainieri, al señalar en reiteradas ocasiones que es necesario duplicar las fuentes de energía de aquí al 2020 (de las cuales sólo el 20% serían energías limpias no convencionales).

Al momento de conseguir el traslado de la termoeléctrica Barrancones expresó que “necesitamos energía para alimentar el desarrollo, el crecimiento, la creación de empleos y la mejoría en el bienestar de todos los chilenos” y actualmente se ha pronunciado a favor de realizar estudios en torno a la viabilidad de utilizar energía nuclear en Chile.

Por otro lado, durante los gobiernos de la Concertación se aprobaron y construyeron varias termoeléctricas -entre ellas la de Mejillones, en la Segunda Región, cuyos vecinos han reclamado en reiteradas oportunidades por el impacto ambiental que generó- y numerosos proyectos de energías “no limpias”.

Fuente: El Ciudadano

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