Hoy solo queda el recuerdo de un pasado glorioso de la minería Artesanal en la región de Atacama
La Región de Atacama, ubicada en el norte de Chile siempre mostró una fuerte actividad minera. A partir de las culturas pre-hispanicas, durante la colonia y la época de la industrialización global, finalmente hasta la actualidad la minería es la actividad económica más importante de la zona.
Gracias a este auge es que nacieron un sin número de pueblos, los que hoy muchos de estos están desaparecidos y solo quedan vestigios de lo que fue el inicio de la pujante actividad minera en la región.
Cada uno de estos pueblos guarda una importante historia que a continuación damos a conocer como muestra de que aun siguen vivos en el recuerdo de Atacama aunque de ellos solo encontremos ruinas.
Las ruinas de Puquios
Se ubican en la pre-cordillera, a 60 Km. hacia el este de Copiapó. Puquios era un pueblo minero con más de 5000 habitantes, estación ferrocarril y alcalde. A partir de los años 30 los mineros abandonaron este sitio. Hoy día se puede observar los restos de las casas, las plantas industriales y el cementerio.
Las casas principalmente eran de adobe y todavía se puede imaginar el diseño del siglo pasado. Puquios era conectada con el ferrocarril de Caldera – Copiapó.
Su ubicación cerca de sectores mineros como Dulcinea y Tres Puntas aseguraron un cierto desarrollo.
Guillermo Wheelwright proyectó a partir de Puquios una línea férrea hacia Argentina. Pero la caída de la minería al fin del siglo, problemas del financiamiento y dificultades topográficos no permitieron este proyecto.
Carrera Pinto
Se ubica entre Copiapó e Inca de Oro. El Pueblo quedó abandonado en las ultimas décadas. Hasta los años ´90 vivía una persona y existía un kiosco en el sector.
Según cuenta la historia Carrera Pinto era muy importante, puesto que su ubicación entre el temprano ferrocarril de Puquios y las minas de Tres Puntas, le aseguró un tráfico considerable de pasajeros y metales.
Chañarcillo
Con el pueblo «Juan Godoi» (hoy: Juan Godoy) es probablemente el distrito minero histórico más conocido y también más mítico de la Región Atacama.
La antigua mina Chañarcillo con el pueblo abandonado de Juan Godoy se ubican entre Vallenar y Copiapó. Las ruinas del pueblo antiguo «Juan Godoy» muestran el impactante crecimiento económico del sector . Las minas de Chañarcillo están cerradas y no hay recorridos turísticos en el sector. Los piques y socavones antiguos no muestran ningún tipo de medidas de seguridad. Además es un laberinto sin salida. Las ruinas del antiguo pueblo muestran todavía las dimensiones que tenía la aldea. Se puede reconocer las calles y algunos cimientos de edificios.
Tres Puntas
Probablemente el segundo distrito minero histórico más conocido después de Chañarcillo. Ubicado a 80 kilómetros de distancia de Copiapó.
En el lugar todavía se puede observar una gran cantidad de minas abandonadas con restos de plantas y edificios. Del mítico pueblo quedaron algunos muros y cimientos.
Entre 1848 y 1922 la producción alcanzó desde 20 hasta 70 toneladas de plata fina anualmente. Según descripciones históricas, Tres Puntas podría ser una ciudad modelo de una película del oeste. En la zona se instaló una minería altamente tecnificada para esa época. Especialmente las minas de empresas inglesas alcanzaron cantidades de producción impresionantes.
Lamentablemente los yacimientos no continuaron hacia profundidades muy altas, las leyes se bajaron y la mineralización se cambio.
Pero la época de bonanza de este distrito no fue tan corta como generalmente se ha pensado: casi 30 años después del descubrimiento la producción de plata fina alcanzó casi 27 toneladas. Hay que considerar que en aquellos tiempos (entre 1895 y 1910) la plata como metal entro en una crisis mundial. El precio cayó hacia al fondo – y una recuperación se alejó cada año. Muchas minas perdieron para siempre su rentabilidad.
Carrizal Alto
Era uno de los sectores mineros más importantes de la Región Atacama. Ubicado entre Copiapó y Vallenar, a unos 30 kilómetros hacia al este de Carrizal Bajo. Hoy día solo quedan restos de este pueblo emblemático. El gran cementerio todavía resiste pero el tiempo de desuso ya se nota.
Para llegar a Carrizal Alto hay que tomar el camino Carrizal Bajo – Pan Americana y en Canto de Agua hay que doblar hacia al norte. A un kilómetro de llegar al pueblo se ve a mano derecha el cementerio.
Durante todo el camino se puede observar el trayecto abandonado del ferrocarril. Como en todos los sitios históricos:
Hoy día se quedan solo restos de este pueblo emblemático, en el que se desarrolló un trazo importante de la historia minera cuprífera atacameña en el siglo pasado. Para hacer un poco de memoria, el mineral de Carrizal Alto se ubicaba exactamente, de acuerdo a documentos de la época, a 477 metros sobre el nivel del mar, a 5 kilómetros al norte de Canto del Agua y en el departamento de Freirina.
De acuerdo a versiones de carácter oral, recogida por historiadores locales, se atribuye al indio Quichomanque el descubrimiento del mineral de cobre Carrizal, y es posiblemente uno de los primeros que trabajó allí para extraer el mineral.
En el sector “del Bajo” se situó la villa de Carrizal Alto, donde residió el mayor número de mineros y sus familiares. Se ubica a 434 metros de altitud y a 36 kilómetros al este del pueblo de Carrizal Bajo. En esta villa fue que se estableció la Recova, la oficina del subdelegado del Gobierno, Registro Civil, Correos, Telégrafo, Colegios, plaza, teatro, iglesia, estación ferroviaria, hospital y lazareto.
«El Morado»
Se encuentra a 43 kilómetros hacia al oeste de Domeyko. En el pueblo todavía existen casas casi intactas. Un gran número de las construcciones son de adobe y tabique. Algunas solamente de pircas o de pura madera.
En la entrada del pueblo llama atención un derrame del tranque de relave ubicado algunos kilómetros más arriba del pueblo.
Llama atención que El Morado (no era un pueblo demasiado grande, pero tampoco pequeño), no figura en muchas cartas históricas. Las estadísticas nombran por el año 1895 solamente 295 habitantes.
Así El Morado falta completamente en el mapa de 1919. En los mapas de los años 1950 en adelante está incorporado.
En 1952 se intensificaron las actividades mineras. En las minas y el pueblo nuevamente entró la vida. Con una tecnología minera más moderna y una planta de concentración de minerales trabajaron hasta los fines del año 1973.
Hoy día la explotación de recursos no renovables en la Región Atacama ha llegado a cifras sumamente altas. Principalmente se trata de cobre, hierro, oro y plata; en el grupo de los no- metálicos: calizas, arenas y gravas y fosforita entre otros. Cabe decir que la pequeña minería en depósitos de alta ley – generalmente de tipo vetiforme, todavía se mantiene.