Una impactante historia es la que relataron a El Noticiero del Huasco, los montañistas que encontraron cuerpo momificado en la zona cordillerana de Alto del Carmen durante las fiestas dieciocheras.
Se trata de los montañistas Alex Vivar y Geraldine Jiménez ambos del club de montaña El Toro y del Cuerpo de socorro Andino (delegación Atacama), quienes salieron de expedición el pasado 15 de septiembre.
Según lo relatado, explicaron que comenzaron el ascenso por una ruta sin acceso a agua, lo que obligó a transportar todo la necesario para la expedición en las mochilas. “El primer campamento lo armamos a 11 km a 2.900 msnm. El martes iniciamos ascenso hasta la cumbre del cerro que se ubica a 10 km del primer campamento y a una altura de 4.500 msnm. A eso de las 15:30 hrs, ya casi llegando a la cumbre, en ya a 4.429 msnm, decidimos desviar la ruta «un poco más a la derecha» para evitar un pequeño nevero, que a esa hora estaría blando por efecto del sol. De esta manera tomamos el «filo» de la montaña, y en medio de un roquerío se logró divisar un extraño bulto que, a simple vista, parecía un animal. Al acercamos, y observar con más claridad, notamos que era una persona y que por los restos de sus vestimentas dedujimos no era un montañista sino más bien un arriero”, recuerda.
“La escena fue muy impactante, es totalmente inusual encontrarse con algo así en una expedición en Chile. La persona aún conservaba algunos textiles de su vestimenta, como parte de su pantalón de mezclilla, un cinturón, y vestigios de lo que parecía ser una camisa. Impresionantemente, los zapatos que llevaba se encontraron casi intactos. En cuanto al cuerpo, si bien algunas osamentas a la vista como en las piernas y brazos, también conservaba muchos tejidos que a simple vista aparecían estar momificados, ya que parecían estar secos y rígidas, lo que corresponde con la particular descomposición que ocurre en altura, . Es muy distinta la descomposición de un cuerpo en condiciones de altura, ya que existen menos microorganismos y las temperaturas, el viento conservan un clima diferente”, explica el montañista.
Vivar y Jiménez, explicaron que tras el hallazgo, “tomamos algunos registros, marcamos el punto en GPS y llegamos al campamento a eso de las 19:00 hrs donde pasamos la noche, y a primera hora del miércoles 17, bajamos hasta el retén de Conay para realizar al denuncia. Agradecemos la rápida gestión de Carabineros, quienes acogieron nuestra declaración, les compartimos toda la información y coordenadas para que pudiesen realizar la extracción, la que llevaron a cabo al día siguiente”, explicaron.
“Hoy lo que esperamos, es que se pueda reconocer su identidad y encontrar a su familia. Creemos que existió algo que no podemos explicar, que nos llevó a estar justo en ese lugar, a esa hora (para que evitemos el nevero) y en esas condiciones climáticas, todo para poder encontrarlo. Las fotografías se entregaron únicamente a Carabineros y decidimos no difundirlas por respeto hacia él y sus seres queridos”.
“Deseamos que este hallazgo contribuya a dar paz y descanso tanto a la persona como a quienes lo hayan perdido. Una vez se conozca su identidad, como club nos gustaría subir nuevamente para dejarle un reconocimiento en su memoria”, finalizó.
