Probamos el Samsung Galaxy Tab, que cuenta, además, con soporte Flash y dos cámaras.
Si al iPad lo acusaron alguna vez de ser un iPhone gigante, el nuevo Galaxy Tab de Samsung se lleva la condena inmediata. Esto porque la nueva apuesta de Samsung para enfrentar al iPad se ve, se siente y se asume como un celular. No es menor, la compañía optó por el sistema Android para hacerlo funcionar, un software diseñado precisamente para smartphones. ¿Y funcionó la apuesta? Probamos el equipo con todas sus virtudes y defectos. Esto fue lo que pasó.
Los que ya hayan probado un equipo Android podrán usar la Galaxy Tab totalmente de memoria. Los que son nuevos con el sistema, no tanto. Aunque Android es en muchos aspectos más funcional que iOS -el sistema de Apple- viene con un costo: la navegación dentro del equipo es mucho menos amigable que en un iPad. Para hacerse una idea: el iPad sólo posee un botón en su pantalla, mientras que el Galaxy Tab, cuatro.
Al haber optado por el sistema de código abierto de Google, Samsung decidió jugársela por un sistema que no necesariamente se adecúa a su dispositivo. El resultado es una experiencia un tanto lenta en la navegación, tanto de menús como en internet. Lo bueno es que también heredó las cosas buenas de Android: viene con soporte de multitareas incluido y con tecnologías como Flash, sistema que permite ver videos e imágenes y que es una de las grandes deudas del iPad.
No es todo: también integra la posibilidad de llamar directamente a cualquier teléfono (en el iPad eso no es posible), conectarse a 3G con una tarjeta SIM y contar con localizador GPS, características típicas de celulares, pero que los tablets siempre obvían.
Como su fin es ser una competencia directa al iPad, Galaxy Tab agregó características que no se ven en el tablet de Apple. Por ejemplo, la posibilidad de aumentar la capacidad de almacenamiento de datos, ya que incluye una ranura de tarjetas microSD, que permite agregar hasta 32GB a la capacidad original, que es de 16GB para el modelo más básico. Las ventajas de tener una ranura para tarjetas microSD son infinitas. Música, juegos, videos y libros pueden pasarse sin mayores inconvenientes desde un computador al equipo.
Una sorpresa guardada bajo la manga es que el modelo que llega a Chile permitirá ver TV sin usar internet, gracias a un sintonizador que utiliza tanto la norma análoga como la digital chilena. Al probarlo, la recepción digital superó con creces a la análoga, sobre todo en interiores. El sistema también permite grabar directamente desde la transmisión en vivo.
También ofrece dos cámaras: una frontal de 1,3 megapixeles para hacer videoconferencias y otra de 3,2 MP para tomar fotos y grabar videos, aunque la experiencia, como suele pasar, no es tan buena. La pantalla es demasiado grande para la calidad de las fotos, lo que hace que se noten de peor calidad. El consejo es pasar mejores fotos desde un PC.
En resumen, Galaxy Tab responde a las necesidades básicas del público que busca un tablet: entretiene, deja todo a la mano y cuenta con una tienda de aplicaciones robusta para ampliar su uso, desde acceso a redes sociales hasta lectores de libros digitales. Hay mucho por mejorar -sobre todo en el campo operativo- pero una cosa es clara: al contrario de lo que dijo Steve Jobs, sí hay lugar para las pantallas de 7 pulgadas.
Fuente: La Tercera