Un interesante proyecto destinado a la recolección de semillas y plantas originarias, principalmente de la etnia diaguita, mediante la investigación y el reencuentro con la cultura ancestral del valle del Huasco, fue dado a conocer, recientemente, en la provincia del Huasco, el cual apunta al rescate de la biodiversidad agrícola de la provincia del Huasco con interés patrimonial y comercial.
La iniciativa impulsada por la comunidad diaguita del valle del Huasco y financiada con recursos del sector privado a través de la empresa minera Teck Relincho, es el resultado de un valioso trabajo en el que han intervenido muchas personas, agricultores, la comunidad diaguita, técnicos y profesionales que han puesto su empeño por el rescate de esta herencia tan valiosa, tal como lo señala el consejero diaguita, Ernesto Alcayaga.
El proyecto constituye un valioso complemento al trabajo que viene desarrollando el gobierno con el mundo agrícola, hay una responsabilidad compartida a través de este proyecto destinado a la protección y preservación del patrimonio genético, patrimonio agrícola y variedades ancestrales presentes en el valle del Huasco, y a partir de ello constituirse en una real y efectiva oportunidad de nuevos productos que se sumen a la ya generosa tierra huasquina, y ahí ha de estar presente el apoyo del gobierno, mediante la asignación de recursos, la asesoría y orientación que se requiera, expresó el seremi de agricultura, Alex Madariaga.
En tanto que la gobernadora provincial Berta Torres, valoró la instancia generada entre el sector público y privado por concretar este tipo de acciones que apuntan al rescate, a la protección, a la conservación y preservación de nuestro patrimonio cultural, sin duda una herencia muy valiosa de nuestros ancestros y que hoy a través de este tipo de estudios, cobran plena vigencia, señaló.
La gobernadora, concluyó sus conceptos, destacando uno de los principales enunciados en el lanzamiento del proyecto, “la biodiversidad agrícola es la base de la seguridad alimentaria de un país y debe ser reconocida, promovida y protegida por todos, asegurando su uso y dominio público, como una herencia indígena y campesina gratuita”, puntualizó.
