Con la creación de las diversas instancias de protección al medio ambiente, se estaría completando la nueva institucionalidad de ese sector, tras la creación del ministerio, el Servicio de Evaluación Ambiental y la superintendencia el 2010.
«Tomando el ejemplo de Arica y la contaminación por polimetales, se ha desarrollado un plan integral, de hacer los estudios de evaluación de riesgo que nos lleven a tomar las mejores decisiones de mediano y largo plazo que signifiquen la rehabilitación de los sitios contaminados», fue uno de los temas a los cuales se refirió Irarrázabal.
– ¿Cómo se recurre a estas instancias?
– Por un lado está el Servicio de Evaluación Ambiental, que evalúa los proyectos; la Superintendencia que fiscaliza y sanciona; y por otro lado está el ministerio de Medioambiente, cuyo rol es lo que tiene que ver con el control de la contaminación y la biodiversidad.
Multas disuasivas
«Estamos velando porque los proyectos cumplan con la normativa ambiental y las resoluciones de calificación que establecen medidas de mitigación respecto de los potenciales impactos que causan», explicó por su parte el superintendente de Medioambiente.
– ¿Hay un aumento en las multas por infracciones?
– Aumentaron en 240 veces. Pasaron de 500 UTM a 10 mil UTA (9 millones de dólares aproximadamente), como monto máximo, lo que es bastante disuasivo.
Además de Santiago, los primeros tribunales ambientales estarán en Antofagasta y Valdivia, aunque, según se explicó, las denuncias se pueden hacer en juzgados de letras, donde se remitirán en forma automática.
El intendente Barbosa, en tanto, solicitó a las autoridades evaluar la posibilidad de integrar a Arica y Parinacota como una de las primeras regiones en contar con una oficina regional del servicio, luego que sean establecidas en los territorios descritos.
Fuente: La Estrella del Arica