Para muchos aún causa bastante pena y nostalgia, transitar por calle Prat, a la altura de Alonso de Ercilla, por afueras de lo que fue una de las casas patrimoniales más bellas que tenía Vallenar y que hace poco más de un mes fue devorada por un incendio. Las causas, aún se desconocen y tanto la Fiscalía, Bomberos y Carabineros continúan con las investigaciones, para concluir si el siniestro fue intencional o accidental, con el fin de poder, quizás, acallar los miles de rumores que surgieron luego de destruida la vivienda. Rumores y comidillos, que con el tiempo no han decantado y que día a día crecen en la capital provincial y que hasta el momento no piensan aminorarse hasta que la justicia dictamine las causas del siniestro.
Al margen de los hechos, uno de los más afectados por el incendio que destruyó lo que antes había sido el Café Copacabana, la pensión Argandoña, pub restaurantes, y diversos locales comerciales, fue el esforzado comerciante local Mauricio Díaz Roa (34), quien junto a su mujer, Ximena Zepeda, tenía un negocio desde hace 11 años y que a punta de esfuerzo y trabajo habían logrado levantar. “Comercial Jeyson” se llamaba, y más de algún huasquino alguna vez debió haber comprado algún producto en el lugar.
“El Noticiero del Huasco” quiso conversar con él y conocer su versión, sus sentimientos y más que nada, la verdad de un hecho que para él, “tuvo manos negras”.
Acompañado de su esposa y uno de sus hijos (Bruno), nos recibió en su acogedor hogar, para en la tranquilidad de su familia detallarnos algunos pormenores de lo que fueron los días antes y después del siniestro.
Mauricio, luego de casi un mes del incendio que afectó el local ya has podido tranquilizarte y calmarte, en relación a lo que fue esta pérdida, ¿Cuál es el sentimiento actual con esta situación?
El pensamiento mío y de mi familia es de impotencia y de injusticia, porque el incendio tiene muchas cosas negras y ocultamiento de varias cosas en el procedimiento. Esto lo hemos hecho notar en varias partes y lo hemos dado a conocer y puedo decir que lo que se debe realizar normalmente para un caso de incendio no se realizó, siendo una propiedad central, estando muchas autoridades comunales en el sector y se pasaron a llevar muchas cosas en el procedimiento del incendio.
Para saber un poco la historia de tu local ¿Cuánto tiempo llevaban allí y a que se dedicaban?
Nosotros llevábamos poco más de 10 años, y nos dedicábamos a la venta de artículos importados, mayorista y minorista, juguetes, artículos de colegio y de toda temporada.
¿Tenían algún contrato con alguien?
El contrato lo mantuvimos con la señora Silvia Martínez, que representaba a la Sociedad Agrícola y Ganadera Socoaga Ltda, que era lo que salía en el contrato.
¿Ella era la dueña del sitio?
Claro, ella era la dueña, pero su hijo William Baraqui era el encargado de administrar la propiedad, y también de cobrar y recibir el dinero por cada mes de arriendo.
Tengo entendido que ustedes tenían una fecha o plazo para salir de allí, ya que al parecer los dueños tenían pensado arrendar o hacer algún tipo de negocio con la empresa que se encuentra al costado (DIN)…
Claro, desde el mes de enero a nosotros nos solicitaron entregar el local. A todos los arrendatarios que estábamos en esa esquina, y la primera fecha que pusieron ellos fue el 30 de abril. Nosotros y el pub Nativo, no pudimos entregar en esa fecha, no pudimos salir, que es una fecha que la colocan ellos, pero que si nosotros nos acogemos a leyes de arriendo y otras cosas más, se puede extender el plazo, pero nosotros no queríamos ir en esa pelea. Nosotros sólo necesitábamos un tiempo prudente, unos dos o tres meses más porque estábamos comprando una propiedad.
En los días cercanos al incendio (24 de junio), ¿ustedes ya estaban en el plazo límite para salir del edificio o aún les quedaba tiempo para irse?
Después del plazo de abril, la familia Baraqui nos puso una demanda, la que no se llevó a cabo porque hicimos un avenimiento en el juzgado. Entonces se puso un plazo para entregar el 31 de julio la propiedad. La demanda fue por no haber entregado el local en la fecha establecida por ellos.
¿Las relaciones con los Baraqui ya estaba mala o se deterioro con la demanda?
Después de eso ya se echo a perder la relación con ellos. El arriendo siguiente se pagó en la Tesorería, luego en la cuenta del Juzgado…
¿Se quebraron las relaciones?
Claro, completamente
¿Qué pasó los días anteriores al incendio, fueron los dueños de la propiedad a visitarlos o los arrendatarios de El Nativo, pasó algo que para ustedes fuera extraño?
Hay algo que nos extraño mucho. Un mes antes del incendio, llegamos al local en la mañana y estaba inundado de agua. Y los vecinos, otros comerciantes saben. Yo iba a colocar una queja en carabineros y el arrendatario de El Nativo nos dijo que había sido culpa de ellos, porque se había quedado una llave abierta. Pero era bien raro, porque no había pasado eso en años y justo se les quedaba una llave abierta y se inundaba todo el local nuestro. Muy raro. Entonces no pusimos ningún denuncio. Después, el día anterior al incendio, hicimos revisar con un gasfíter las cañerías que quedaron al descubierto después que salió El Nativo, porque ellos se llevaron implementos de cocinas, y dejaron cañerías desconectadas. El gasfíter las selló y después dio el agua y no hubo ninguna filtración y hay gente que dice que corría agua en la noche, pero no podría asegurarlo…
¿A esa altura El Nativo ya se había retirado del segundo piso?
Sí. El incendio fue el día jueves 24 y el sábado anterior El Nativo hizo su último evento, y hasta el martes estuvieron retirando todo lo que les quedó arriba
¿Después del agua no volvió a pasar nada más, que para ustedes fuera extraño?
El día anterior, aparte del gasfíter también subió don Willy Baraqui. Subió con el gasfíter, luego subí yo solo con el gasfíter a revisar que no hubiera quedado ninguna filtración.
¿A qué subió el dueño?
Supuestamente a revisar también, pero no había nada extraño. Incluso yo subí con linterna al atardecer porque no había luz funcionando arriba, y no había ningún elemento que pudiera ocasionar un incendio, sin embargo, el incendio comenzó en el segundo piso.
¿Cómo saben eso ustedes?
Eso está en el informe de carabineros y los testigos iniciales, bomberos, carabineros, los que estaban allí, vieron el fuego arriba y en un video sale también cuando se vino abajo el segundo piso y quemó el primero.
¿Hay rumores que dicen que se escuchó bulla, ruidos de fiesta, el día del incendio en el segundo piso de la construcción?
Sí, hay un vecino de la propiedad, de una familia del sector que dice que escuchó ruidos de fiesta. Dice que habían ruidos que eran los normales que se sentían como cuando funcionaba El Nativo.
¿Y en esa fecha El Nativo ya no estaba y tampoco el arrendatario no tenía llaves del local?
Claro, el dueño de El Nativo no tenía llaves…
¿Qué les han dicho hasta ahora del incendio?
Hasta hoy, el fiscal aún no recibe los informes de carabineros y la PDI, a un mes del incendio y tengo entendido que no tiene muchas intenciones de investigar el incendio.
¿Han conversado con bomberos para agilizar los informes?
Yo he hablado con algunos que conozco, pero no pueden hacer más allá porque necesitan una orden del fiscal. Y además, se intervino la zona del incendio apenas estuvo controlado el siniestro. Llegaron maquinarias, camiones, a remover, a sacar escombros y a botar muros que habían quedado firmes que no era necesario botar hasta que se hiciera la investigación.
¿Tú sigues pensando que hay algo oculto…?
Sí claro. Hemos recibido muchos comentarios, pero no hay pruebas. No podemos levantar falso testimonio hasta que hayan pruebas. Tenemos un abogado que lleva el caso, pero no ha avanzado mucho porque el fiscal no ha ordenado investigar
¿Continuarás en el negocio…?
Nosotros somos jóvenes, estamos bien anímicamente, pero sentimos la necesidad de aclarar esto. No queremos que se quedé en un incendio de Vallenar, que quede en el olvido, porque no es un evento casual, sino un evento ocasionado. Por cualquier persona, no necesariamente que haya sido enviado, pero alguien lo ocasiono
¿Tienes enemigos?
Que sepa no, declarados no, pero existe mucha envidia, que ven como uno va progresando y no todos lo hacemos de la misma forma que otros…
Un hecho que Mauricio y su familia busca que sea aclarado. Que no quede en la impunidad, como muchos casos a nivel nacional y en el cual no se encuentran los culpables. Perdió, según estimaciones propias, más de 50 millones en mercadería, pero que gracias a ahorros de un esforzado hombre de trabajo, no se notaran a la hora de volver a levantar su negocio. Quiere eso sí, que su hijo pequeño no vuelva a soñar más con el incendio de su local (sueño que tuvo la misma madrugada del siniestro), sino más bien con el día en que se haga justicia. Una justicia que más que un sueño, tarda, pero llega…