Según un estudio realizado por FIA —dado a conocer en el marco de un seminario internacional— este continente presentaría una mayor potencial, tanto desde el punto de vista comercial como de la capacidad de la industria local, para abordarlo.
Europa sería un mercado atractivo para la comercialización de flores chilenas, así lo reveló un estudio realizado por la Fundación para la Innovación Agraria (FIA), del Ministerio de Agricultura, y que se dio a conocer en el seminario “El mercado internacional de las flores de corte: Oportunidades para la industria exportadora chilena y actualización en innovaciones en procesamiento, distribución y transporte”, realizado en el Hotel Four Points de Santiago.
El evento organizado por FIA —con el patrocinio de ProChile y de la Oficina de Estudios y Políticas Agrarias (ODEPA)— contó con la presencia del Subdirector de FIA, Fernando Bas; la sectorialista del Subdepartamento Agropecuario de ProChile, Eugenia Sandoval; y el director del área de Consultoría e Implantación de INFOCENTER España, Eduardo Ubide, entidad encargada de realizar la investigación.
El estudio se llevó a cabo con la finalidad de dinamizar la industria de flores de corte orientada al mercado internacional, ya que ésta muestra —en los últimos 15 años— un estancamiento en términos de volumen y valor exportado.
En el comercio internacional de flores de corte, Chile presenta escasa competitividad en especies tradicionales de gran demanda, como rosas y claveles, frente a grandes países productores como Colombia y Ecuador.
Es así como para alcanzar el objetivo señalado, la investigación se orientó a identificar las oportunidades en los mercados de mayor consumo de flores — Japón, EE.UU. y Europa—, para las principales especies de la oferta nacional que presentan alguna ventaja competitiva.
Las especies objeto del estudio fueron: tulipán, lilium oriental, lilium asiático, lilium L/A, peonía, hortensia, genciana, liatris, ruscus, wax flower, lisianthus, calas, hipericum, ranunculus, anemona, ornithogalum y algunas destinadas a follajes.
“A nivel mundial, Europa, Estados Unidos y Japón son los grandes consumidores de productos florícolas. La demanda de estos mercados es tan elevada que las respectivas industrias nacionales no son capaces de satisfacerla, constituyéndose así en los principales importadores mundiales de flores de corte”, indicó el subdirector de FIA, Fernando Bas.
Y agregó que por este motivo, estos tres grandes mercados en expansión, se consideran con un alto potencial para la comercialización de flores chilenas. “Sin embargo, a partir del estudio —dijo Bas— es posible también advertir que se requiere mucha cautela con los volúmenes ofertados y la concentración de ellos al momento de la comercialización”.
Opciones de mercado
Entre los mercados analizados en el estudio, Europa es el que aparece con mayor potencial, tanto desde el punto de vista del atractivo de mercado como de la capacidad de Chile para abordarlo.
Le seguiría Estados Unidos, con la salvedad de que es preciso que Chile apueste por una reestructuración en el uso de sus recursos para mejorar su posición competitiva en este mercado. Finalmente, Japón queda último entre las tres alternativas, debido a que es el menor mercado y donde Chile evidencia su posición más débil.
En el mercado europeo, las especies con mayor atractivo son la hortensia, ranunculus, lilium oriental e hypericum. Entre éstas, la hortensia es la que presenta mejores perspectivas comerciales y además es una de las más competitivas dentro de la oferta nacional.
En EE.UU. la hortensia presenta una situación similar, mientras que el tulipán, zantedeschia (cala), peonía o liliums registran un atractivo medio.
En Japón, las flores de corte con mayor atractivo son lisianthus y leucadendron. Otra especie es la zantedeschia (cala), que junto con el lisianthus, es una de las que más vendidas en ese país y su precio es uno de los más altos.
Innovación y tecnología
Otro factor a considerar, para mejorar las perspectivas de la industria local, son las innovaciones en procesamiento, distribución y transporte, ya que éstos son aspectos relevantes para su competitividad dada la lejanía de los centros de consumo.
La última tendencia en distribución y transporte es el envío marítimo de flores frescas. Este presenta las ventajas de permitir una mayor carga, un menor consumo de combustible por tonelada transportada y un mayor control de las condiciones de almacenamiento de la carga.
No obstante, uno de los mayores inconvenientes es que el período de transporte es más largo, por lo que requiere del uso de tecnologías de postcosecha y la mantención de la cadena de la frío para garantizar que las flores lleguen en óptimas condiciones del punto de vista de la calidad.
La tecnología más innovadora es la relacionada con los sistemas de empaquetado y envasado que permiten mantener la calidad de las flores durante más tiempo.
A estas se suman cada una de las etapas del manejo de postcosecha: acondicionamiento de tallos recién cortados, tratamientos de conservación, empaquetado y envasado, almacenamiento. Un ejemplo es el caso de los sistemas de envasado en atmósfera modificada que están relacionados tanto con la conservación como con el almacenamiento de las flores