El próximo 03 de marzo todos los colegios de la provincia del Huasco debiesen abrir sus puertas para el regreso a clases tanto de profesores y alumnos, sin embargo, el Colegio de Profesores de la provincia del Huasco mostró su preocupación en torno a las medidas sanitarias y de seguridad que ha tomado el Servicio Local de Educación (SLEP).
Victoria Ceriche, presidenta del gremio en la provincia señaló que están “evaluando todas las condiciones” para la vuelta a clases. “Hay muchas contradicciones en cuanto a las directrices que ha entregado el Servicio Local de Educación. Hemos sabido por redes sociales que los profesores mayores de 60 años y con enfermedades de base deben volver a clases después de la segunda vacuna. Eso no se nos informó oficialmente. Hay preocupación por las condiciones en que se están entregando los colegios, los elementos de protección (sic) que se les entregó a los auxiliares es bastante paupérrimo y en las salas de clases se están protegiendo el lugar en que trabaja el profesor, lo que no será bien recibido por los apoderados”, comentó.
“Los padres están dispuestos a enviar a sus hijos en condiciones seguras, y en este momento no se le están protegiendo. El SLEP no está cumpliendo los compromisos que había contraído con el Colegio de Profesores y nosotros nos enteramos por las redes sociales los cambios que están dando”, dijo la dirigente.
Ceriche señaló que “el Colegio de Profesores no es flojo como han dicho algunas autoridades de Gobierno, estamos preocupados por la salud de nuestros representando y de toda la comunidad escolar, de los niños y sus familias. Estamos dispuestos a volver en el momento que sea necesario pero con seguridad y no podemos exponer a profesores que tienen enfermedades de base y crónicas a la inseguridad que significa volver a clases”.
“En un principio el Gobierno dijo que volveríamos en fase 3, y a nosotros nos está haciendo volver en fase 2, Huasco está volviendo en fase 2. Los aforos de las escuelas, y hemos sabido que están dando 19 personas en una sala de clases de 42 metros cuadrados, y es imposible un aforo de 19 alumnos. Hay mucho desconocimiento y eso es nuestro malestar, no el no querer trabajar”, dijo.
“Estamos en reuniones con distintos gremios de educación y con gran preocupación, de situaciones que no nos parece. Por ejemplo, en el liceo Politécnico se están haciendo trabajos, se están cambiando los pisos y hay 7 colegios en esa situación, sin embargo, nos están diciendo que vamos a volver a trabajar en algún rincón, en algún lugar, donde se pueda mientras los maestros trabajan y esas no son condiciones dignas”, señaló.
“Si el Gobierno dice que debemos volver a trabajar con seguridad y dignos, el trabajar en un rincón no es digno. Entonces tenemos que evaluar las condiciones en las que vamos a volver”, finalizó.